miércoles, 28 de diciembre de 2011

Personajes de la Plaza (Los Monosabios)

PERSONAJES DE LA PLAZA

Pedro Valle


Empezamos esta serie de artículos sobre los personajes de la Plaza de Toros de Madrid con Los Alguacilillos, después subimos al palco para hablar del Presidente. Hoy volveremos a bajar al ruedo para hablar de los que con una sola vara en la mano, y arriesgando en muchas ocasiones su propio físico, ayudan a los picadores  y caballos de picar en su función:

Los monosabios

Al principio de las celebraciones de las corridas de toros, los hoy llamados monosabios, salían vestidos de paisano, hasta que allá por los años treinta del siglo XIX (1830), un empresario madrileño decidió ponerles el uniforme que hoy en dia conocemos y que consta de una amplia blusa roja, pantalón azul, y gorrilla del mismo tono que la camisa.
El origen de la palabra monosabio tiene su razón de ser, y como otras muchas de nuestro idioma, vino por hacerla popular la gente llana que acudía a los toros, ya que hacia el año 1847, fueron exhibidos en un teatro de Madrid una cuadrilla de monos a los que su dueño o domador llamó sabios por las habilidades y gracias que hacían, y a los que vestía con pantalón azul y camisa roja.

El pueblo llano comenzó a llamar a los que acompañaban y ayudaban a los picadores, y que vestían con el mismo uniforme que los monos del teatro, con el mismo nombre que el domador de monos llamaba a estos, es decir monos sabios, palabras que con el tiempo y uso han formado una sola: monosabio.

Una vez hecho este pequeño inciso sobre el origen de la palabra monosabio, vamos ya a meternos de lleno en las funciones que desarrollan en un festejo taurino y que son aparte de tener el orgullo de hacer el paseíllo tras los caballos de picar las siguientes:
Con bastante tiempo antes del comienzo del festejo, los monosabios tienen que calentar, deportivamente hablando, a los caballos que saldrán al ruedo, vestirles con los pesados petos que estos llevan, y en definitiva, tenerlos preparados para cuando llegue el momento de picar al toro. También tienen a su cargo la tarea de ayudar a montar a los picadores, fustigar a los caballos remisos para aproximarlos al toro, tirar de sus riendas, y sobre todo y más importante, asistir en trance de apuro a los picadores y caballos caídos como consecuencia de los encontronazos con el toro.

Debido a su proximidad al toro, en ocasiones  pasan verdaderos apuros, por salvar o hacer un quite a un torero que es cogido.

Otra de las funciones, que por suerte ya está en desuso por el uso de los petos, era la de rematar en la arena a los caballos que resultaran malheridos o muertos, siempre y cuando lo estimasen necesario.

Espero que con estas palabras sobre los monosabios, la gente que acude a un festejo taurino sepa apreciar la verdadera función, nunca exenta de peligro, que realizan estos personajes en nuestra plaza.







No hay comentarios:

Publicar un comentario